Miércoles, 01 de junio
de 2016
Y ella se encuentra tan sumergida en si misma que no puede
ver que pasa en su alrededor.
No es egocentrismo ni egoísmo, es curarse a sí misma.
La ves, desganada, con las alas rotas, tirada en el suelo.
Se ahoga entre sus lágrimas, y parece que ya no puede más.
Teje y teje sus problemas en su cabecita loca.
Teje y desteje sus posibles soluciones.
Dale que te dale, da vueltas y vueltas en un mismo lugar.
Y ella se encuentra tan vulnerable que no puede mantenerse
en pie.
Tiene el corazón en la mano y la guardia baja.
Frágilmente encantadora.
Aún puede fingir una sonrisa… tramposa, para que nadie note
lo rota que esta.
Y a ella ya no le importan las cosas que pasan.
Todo pasa y ya nada la toca.
Todo pasa y ya nada la toca.
Todos pasan y ya nadie la toca.
Y ella cree merecer lo que le sucede.
Cree en el karma.
Cree en el karma.
Sabe que todo vuelve, y a ella todo le está volviendo.
Se hunde entre sus hombros.
Se hunde entre sus sabanas.
¿Se siente segura?
¿Se siente segura en algún lugar?
Y ella se relame las heridas.
Y ella sabe que va en caída libre.
Y ella sabe que puede salir de esta,
pero prefiere quedarse un poco más…
pero prefiere quedarse un poco más…
No hay comentarios:
Publicar un comentario